Arsenio y los discos de Pink Floyd

está oscuro ahí fuera
y llueve en mi corazón
una helada desgracia que
lo cubre
todo.

escribo apenas, para recordar
que las voces que
me habitan
y parecen escupir imágenes
muertas
de una felicidad caduca
no son
las únicas formas
que mis manos pueden simular
poseer.

hoy es muerte
todo lo que poseo
y mañana será otra vida
otra encarnación
de estas imágenes que
he tatuado en mis ojos
y me dejan desprotegido
de esas sombras
que
lo oscurecen todo…

abrazan mis venas, las dejan
tibias y perfectas
sanas y ubicuas
remplazando todo aquello
que una vez fue construido
por mi memoria y mi
imaginación.

abrazan mis almas, las cubren, las
esculpen en una hora sin tiempo
en una hora detenida
como un grano de arena
que es olvidado en una playa
de arenas oscuras y
espuma plateada

las voces se callan
me desgarran el sentimiento de
pertenecer a algo
a alguien
de estar petrificado ante un hecho
ante un acto
ante una condena
que se relaciona
con el vacío perfecto
que cada mañana encuentro
en ese hueco
que ocupabas a mi lado
cuando las voces
apenas
eran susurros de temor
en tus ojos mojados y
pequeños
y llenos de
anhelo y
grandes esperanzas
de que yo
nunca escribiera
estas letras

(Foto del texto... Claro que lo sabemos, ¿no?... En fin... Es de Bukowski)

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